Nuestra boca contiene bacterias que se deben eliminar diariamente con un cepillado de dientes, en caso de que no se haga estas se acumulan en los dientes y se alimentan de restos de los alimentos que ingerimos y forma lo que conocemos como placa dental o bacteriana, que es una capa blanco-amarillento que se encuentra en la base de los dientes. Esta placa se debe tratar rápidamente pues de lo contrario se endurecerá mineralizándose y se transformará en sarro que es más difícil de remover, por lo que se tendrá que acudir a un dentista. Si no se elimina conlleva unos riesgos pues favorece la proliferación de más bacterias y puede producir que se inflamen nuestras encías e incluso sangrado (gingivitis), por lo que se dañarían los tejidos de soporte de los dientes y puede provocar la pérdida del diente.
Fuente: tu boca es vida |
Este descuidado bucal no sólo afecta a nuestras piezas bucales, sino que también a nuestro corazón, pues la acumulación de bacterias como dijimos puede provocar la aparición de caries, pero además puede alcanzar el torrente sanguíneo y afectar al corazón produciendo cardiopatías o incluso infartos.
De conclusión sacamos que una higiene adecuada de la boca, a parte de evitarnos problemas en ella, se reduce en un 13% las probabilidades de sufrir un ataque al corazón, por lo que es beneficioso cuidar nuestra higiene bucal y es tan sencillo como cepillarnos los dientes unas dos veces al día, usar el hilo dental para aquellas zonas de más difícil acceso y visitar con cierta regularidad a nuestro dentista,
por si hay algún problema detectarlo a tiempo.
Referencias:
http://www.handsonhealth-sc.org/page.php?id=1657
http://www.clinicadentalsieiro.es/sarro-en-los-dientes/
http://www.listerine.es/problemas-bucales/caries/causas
https://www.propdental.es/blog/actualidad/higiene-bucal-protegera-tu-corazon/
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