El alcohol es una de las drogas
más consumidas en la actualidad, ya que es muy común que en nuestras relaciones
sociales tomemos alguna bebida alcohólica aunque contenga una baja graduación,
como puede ser una caña, pero todo ello favorece la
extensión de su consumo, lo que conlleva a que cada vez se inicien en edades
más tempranas.
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| Fuente: blog la guardia de bam |
A pesar de que el consumo moderado de alcohol no acarree peligros para la salud, o incluso resulte beneficioso, tal y como puede ser tomar una copa de vino tinto al día, en muchos casos nos excedemos en la ingesta y esto sí que acarrea graves problemas para la salud (según la OMS es un factor de riesgo para más de 200 enfermedades) y no solo se ve afectado esto, sino que también se ve afectado el entorno del individuo.
El compuesto principal del alcohol es el etanol y su cantidad varía en función de si se trata de bebidas destiladas o fermentadas, en el primer caso entre 35-60%, mientras que en las fermentadas entre 2-20%,pero independientemente de su porcentaje el etanol es una droga psicoactiva, al principio tenemos la sensación de alegría y de pérdida de la vergüenza, pero luego se producen problemas en la coordinación, visión borrosa, etc., pero esto se debe a que es un depresor del sistema nervioso central (SNC), es decir una sustancia que disminuye la actividad cerebral.
A parte de problemas a nivel del SNC, por pérdida de
memoria, daños en el cerebro… también afecta a otras partes del organismo como
puede ser el hígado, sistema circulatorio o sistema digestivo.
- Hígado: se encarga de transformar el alcohol (se metaboliza el etanol) y esto provoca la acumulación de grasa dando lugar a problemas hepáticos como hepatitis, cirrosis...
- Sistema circulatorio: el corazón aumenta la frecuencia cardíaca, le tensión arterial y el pulso. A nivel de los vasos sanguíneos se produce una vasodilatación, por lo que vemos a la persona colorada.
- Sistema digestivo: produce una abrasión de las paredes del esófago y estómago que puede provocar inflamación y si se continúa provoca la aparición de úlceras y puede terminar en cáncer. A nivel del intestino delgado impide la correcta absorción de vitaminas importantes, también se ve afectada el movimiento intestinal y las secreciones, por lo que se puede producir estreñimiento o diarreas.
Para más información sobre efectos en el organismo ver:
Lo que vemos es que un consumo no moderado de alcohol supone muchos riesgos para la salud, por lo que es conveniente llevar a cabo una serie de cambios poco a poco que van a reducir las probabilidades de tener problemas relacionados con la bebida.
Referencias:
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